Rubens, dinos ¿A qué se debe tu vuelta a las competiciones de karting?

Mis hijos, Eduardo y Fernando, son apasionados del karting. Cuando empezaron a competir en los Estados Unidos, naturalmente iba con ellos a los circuitos. ¡Admito que tuve un pequeño problema mirando como mero espectador! Así que rápidamente me acabé sumando a las carreras: ¡compartimos la emoción por la competición bastante!

Como fue que llegaste al Mundial KZ?

En realidad, soy un competidor antes de todo y no quería simplemente completar un cupo. Progresé en los eventos más importantes de América y Europa para eventualmente involucrarme en el Campeonato del Mundo de KZ con el equipo BirelART Motorsport. Fui a Kristianstad principalmente por mi propio placer. Sabía que no podía competir con los mejores especialistas.

¿Qué conclusiones sacas?

La competición de karting es extremadamente difícil a ese nivel. En términos de rendimiento puro, no estaba muy satisfecho con mi rendimiento. No había usado los neumáticos blandos de KZ lo suficiente y era difícil explotar el agarre del circuito con goma y la brutal potencia del motor. Mi compañero Jordon Lennox-Lamb fue mi punto de referencia. Con trabajo duro, reduje a la mitad mi diferencia con él para llegar aproximadamente a 4 décimas de sus tiempos, lo cual no está mal. Terminé dos puestos por detrás suyo en la Final, aunque reconozco que no fue fácil.

Repasa desde aquí los resultados del último Mundial CIK FIA en la clase KZ